Urge Bush el TLC con Colombia

[Omaha Steve]

http://www.laraza.com/2008/04/08/urge-bush-el-tlc-con-colombia/

Dramatiza la necesidad del pacto comercial

WASHINGTON, D.C.— El presidente George W. Bush se enfrascó ayer en una batalla con el Congreso demócrata al enviarle el Tratado de Libre Comercio con Colombia y forzar su consideración por la vía rápida (fast track) en un lapso de 90 días.

Con la vía rápida el Congreso debe rechazar o aprobar la medida sin enmendarla.

Dan Restrepo, analista del Center for American Progress, indicó a La Opinión que “el Presidente tomó una decisión muy política al tratar de forzar el proceso y contraria a la tradición de demandar estas acciones cuando hay apoyo del liderazgo del Congreso”.

“Quizás esté buscando algo para su legado internacional que no sea sólo la guerra en Irak, y busca una ventaja política en año electoral”.

Esto porque trata de poner al Congreso demócrata contra la pared argumentando que no apoya la seguridad nacional forzándolos a llevarle la contraria a los sindicatos, tradicionalmente sus aliados.

“Pero forzarlo puede ser perjudicial porque puede tornarse en un debate no sobre seguridad nacional ni libre comercio, sino sobre los derechos del Congreso versus el Presidente”, declaró Restrepo.

El TLC con Colombia y los acuerdos comerciales en general son tema electoral particularmente en estados afectados por el desempleo, como Pennsylvania, que conduce primarias en dos semanas.

Los dos precandidatos demócratas, Hillary Clinton y Barack Obama, se oponen al avance del acuerdo sin que medien una serie de condiciones y se han enfrascado en una competencia sobre quién es el que más se opone a los pactos. Incluso han prometido “revisar” el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica entre EU, México y Canadá (TLC), si alguno llega a la Casa Blanca.

El acuerdo con Colombia también le costó este fin de semana el puesto al principal estratega de Clinton, Mark Penn, así como un contrato con el gobierno colombiano que había seleccionado a su firma de relaciones públicas para cabildear a favor del pacto.
Esto, mientras Clinton hacía campaña en contra del acuerdo. Citando un conflicto de intereses, la campaña de Clinton anunció la salida de Penn quien seguirá colaborando en otros aspectos.

Bush dijo que el avance del acuerdo es un asunto de seguridad nacional, económica, y que su estancamiento pone en entredicho la reputación de este país de mantener su palabra.

“Urge aprobar este acuerdo por razones de seguridad nacional. Colombia es uno de nuestros más fuertes aliados en el Hemisferio Occidental. Es dirigido por un líder fuerte y valiente, el presidente <Álvaro> Uribe… quien ha sido un socio fuerte y capaz en el combate al narcotráfico, el terror y el crimen”, indicó Bush en la Casa Blanca junto a la embajadora de Colombia en EU, Carolina Barco.

El plan ampliará las exportaciones de EU y generará empleos, afirmó Bush.

El libre comercio sirve para enfrentar y combatir “a dictadores y demagogos en nuestro patio trasero”, dijo Bush sin mencionar nombres.

Empero, el TLC con Colombia no ha progresado en el Congreso, entre otras cosas, por el argumento demócrata de que los acuerdos comerciales previos, particularmente el TLC con México y Canadá, no han tenido los resultados anticipados y de hecho, han supuesto la pérdida de empleos en varias regiones de EU.

Fue un presidente demócrata, Bill Clinton, quien estaba en el poder cuando el Congreso aprobó el TLC entre bombos y platillos. Incluso se dijo que generaría empleos en México y contribuiría a reducir la inmigración indocumentada a Estados Unidos.

Pero las bonanzas del TLC no han sido uniformes. En EU se han perdido empleos y en México tampoco ha sido positivo para todo el país pues los estados más cercanos a la frontera parecen ser los más beneficiados.

En el caso de Colombia, los opositores citan además preocupaciones en los rubros de derechos humanos y la protección de sindicalistas, muchos de los cuales han sido asesinados y los responsables no han sido enjuiciados. También se citan los presuntos vínculos entre algunos legisladores colombianos con grupos paramilitares de extrema derecha.

La presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, y el presidente del comité de Medios y Arbitrios, Charles Rangel, indicaron que el acuerdo no será aprobado bajo las presentes circunstancias.

“A pesar de los progresos alcanzados por el presidente Uribe, Colombia sigue siendo un lugar peligroso para los activistas sindicales. Para quienes cometen actos de violencia , no existe amenaza de ser procesados o castigados”, indicaron.

Criticaron además que la Administración presione por el TLC con Colombia, pero no haga lo suficiente por millones de personas que se han quedado sin trabajo o están perdiendo sus hogares en EU.Harry Reid, líder de la mayoría demócrata del Senado, indicó que el Congreso apoya a Colombia y lo demuestra el que reciba la mayor cantidad de ayuda externa en el Hemisferio.Pero un acuerdo comercial no es un paquete de ayuda externa, “ni un favor para gobiernos amistosos, ni un sustituto para una política exterior sensible y sostenida en el hemisferio”, indicó.

Persisten preocupaciones, agregó, por la impunidad con que operan los responsables de matar e intimidar a sindicalistas y a sus familias.El virtual nominado republicano, John McCain, apoya los acuerdos comerciales, incluyendo el de Colombia.

John Sweeney, presidente de la Central Sindical AFL-CIO, dijo que la acción de Bush denota un increíble “desdén por los derechos básicos humanos y de los trabajadores (colombianos)”.